31
Los veterinarios no le daban mucha esperanza de vida a un perro de 15 años llamado Zook y aconsejaron a su familiar que lo sacrificara.
El perro demostró que sólo necesitaba amor y actualmente sigue junto a su dueño con unas ganas locas de vivir.
Zook es un Staffordshire Bull Terrier que ha demostrado que su avanzada edad no es problema para poder seguir viviendo si va acompañada de amor. Gracias a su silla de ruedas especial el perro se ha ido adaptando y es feliz.
Hace unos años Zook se quedó sin poder mover sus patas después de que se debilitaran debido a la espondilosis que afectó a sus huesos y médula espinal.
Sean, familiar de Zook desde que era un cachorro, dijo que el perro era muy juguetón y activo. “Estaba tan harto. No sabía que hacer“.
“Dos veterinarios diferentes dijeron que no había cura y la única opción era el sacrificio. Mirando la cara triste y de estrés de Zook pensé lo mismo“.
“Después de investigar un poco sobre la enfermedad vi que muchos perros utilizaban una silla de ruedas y a final me decidí por hacerme con una silla de ruedas a medida para Zook“, comentó Sean a birminghammail.
“Se hizo muy rápido a la silla y su movilidad, cara y apetito habían vuelto a la normalidad“.
Sean también decidió comprar un pequeño cochecito en forma de cesta. “Le encanta. Cuando me ve preparando su cochecito se pone entusiasmado. Levanta su cuello y ve el mundo. El aire fresco le estimula su cerebro“.
La pareja va junta a todos los lados y pasean juntos todos los días.
31
QUE BELLA HISTORIA, Y QUE FAMILIA MAS HERMOSA , DIOS LOS BENDIGA