La pasada semana mostrábamos un vídeo en el que un gato da un masaje a un perro, hoy os traemos otro vídeo muy parecido.
Esta vez un gato le da un masaje al perro en su cuello y parece que no lo hace nada mal ya que el perro ni se mueve y parece que en algún momento cae profundamente dormido.
Es una muestra de afecto.
De cachorros, los gatos hacen eso mismo mientras maman. Así que cuando están a gusto con alguien o con algo, repiten ese gesto antes de relajarse por completo. Es una muestra de afecto algo dolorosa si el gato tiene las uñas largas, pero es un momento entrañable y muy de agradecer por los humanos que los quieren.