Cuando esta pareja de tigres nació a finales de mayo en el zoológico de Sochi (Rusia), su madre se negó a darles de comer y finalmente una perra de raza Shar Pei los adoptó y se ocupó de ellos.
Cleopatra hace labores de niñera y de madre a la vez, los limpia, los alimenta y juega con ellos. Por suerte, Cleopatra acababa de tener una camada de cachorros por lo que aceptó a los dos tigres como si fueran suyos.
Ahora los cachorros viven con Cleopatra, sus cachorros y un gato llamado Masyanya en una casa de Sochi, al oeste de Rusia, donde son atendidos por su propietario Yekaterina Khodakova.
¡qué imagenes más tiernas!…los animales nos dan una gran lección todos los días;en éste caso nos enseña ésta madre que no importa la raza sino la ayuda que se puede prestar.