Un perro quería jugar con un niño que se encontraba encima de una hamaca en una posición algo inusual. Ante el balanceo de la hamaca el perro se ponía más juguetón y decidió tramar un plan para ponerse encima de la hamaca.
Por todos es conocida la inteligencia de los perros, en ocasiones nos dan lecciones y en este caso el niño se quedó de piedra con la forma de actuar del perro. Es una emboscada en toda regla.