Un hombre sin hogar quiso renunciar a su querido perro hace unos días para que el animal pudiera tener una vida mejor.
El hombre algo despeinado y montado en su bicicleta llegó a las instalaciones del SPCA ubicado en Oakland (California).
Corriendo a su lado iba “Sheba”, una perra mezcla de Labrador y viéndolos se podía palpar la gran conexión que hay entre ambos. También se podía apreciar una cojera en la pata delantera de la perrita.
Les dijo a los empleados del SPCA lo que había sucedido, que se había metido en una pelea de perros. No fue intencional, fue un accidente y ahora la herida estaba empeorando.
La pata de Sheba estaba vendada, pero estaba húmeda, hinchada y estaba empezando a oler, signos de infección grave.
El hombre dijo que ya no se podía permitir la atención médica para ella. La gente del SPCA decidió llevarla dentro y ayudarla pero eso significaría que tendría que renunciar a ella.
Se arrodilló frente a ella y le dijo: “Te amo. Esto es lo mejor que puedo hacer por ti“. “La besó y luego se fue“.
Sheba fue evaluada de inmediato y se pudo comprobar que bajo la venda tenía varias fracturas de cúbito y radio. El estado de la pata no pintaba nada bien y la recuperación sería muy dolorosa por lo que los veterinarios decidieron amputar la pata. Ahora Sheba se recupera satisfactoriamente.
Vídeo: